Día de la Cerveza: Curiosidades de la bebida más popular entre los argentinos
La cerveza es mucho más que una bebida refrescante: cumple un rol social único. Es la excusa perfecta para reunirse, compartir una comida, celebrar o simplemente estar juntos. Ya sea en casa o en un bar, el brindis cervecero sigue siendo un ritual de conexión entre personas.
Pero también hay otra cara: la productiva. En nuestro país, Cervecería y Maltería Quilmes representa el corazón de una enorme cadena agroindustrial. La empresa articula con más de 1.200 productores agropecuarios y abastece a unos 250.000 comercios en todo el país, entre bares, restaurantes, almacenes y autoservicios. Genera además 90.000 empleos y solo en 2024 exportó por 458 millones de dólares. Uno de cada cuatro vasos que vende en el mundo lleva cebada bonaerense.
En cuanto a la calidad, la frescura es clave. La cerveza alcanza su mejor sabor apenas sale de la cervecería, por eso Quilmes apuesta a la producción local, con ingredientes 100% argentinos y más de mil controles de calidad por lote.
Además, es una bebida cada vez más inclusiva. Hoy existen versiones para todos los gustos y necesidades: desde cervezas sin alcohol como Quilmes 0.0, Stella Artois Sin Alcohol y Corona Cero, hasta propuestas sin TACC como Michelob Ultra sin Gluten, la primera cerveza libre de gluten en el país.
También se destaca el compromiso ambiental: toda la energía eléctrica que utiliza Cervecería Quilmes para elaborar sus productos proviene de fuentes renovables, a partir de un acuerdo con Central Puerto.
En cuanto a la cultura cervecera, hay detalles que marcan la diferencia. Servirla en vaso permite disfrutar plenamente de sus aromas, color y textura, mientras que la espuma —dos dedos, ni más ni menos— cumple una función esencial al proteger la bebida del oxígeno y mantener su gasificación.
Por último, el consumo responsable es uno de los valores clave que promueve la industria cervecera. Con más opciones de bajo o nulo contenido alcohólico, se impulsa un disfrute consciente, bajo la consigna del triple CERO: cero al volante, cero excesos y cero en menores.
En su día, la cerveza sigue demostrando que es mucho más que una bebida: es una tradición, una industria pujante y una forma de celebrar la vida, con moderación y buen gusto.