El Gobierno provincial presentó un proyecto de ley para expropiar y declarar de utilidad pública dos predios ubicados en cercanías de la ribera de Quilmes y a metros de la bajada de la autopista para construir establecimientos penitenciarios o alcaldías. La medida generó mucha polémica en la oposición y rechazo en los vecinos de la zona.
El ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Provincia de Buenos Aires, Julio Alak, presentó el proyecto de ley para expropiar dos hectáreas y construir establecimientos penitenciarios y alcaidías departamentales en Quilmes. La medida se da en el marco del plan de seguridad anunciado por Alberto Fernández, el cual prevé la construcción de 12 unidades carcelarias y la refacción y ampliación de varias de las existentes por un presupuesto de 20.531 millones de pesos.
El proyecto busca principalmente descomprimir el hacinamiento carcelario. En los últimos años se han realizado obras de ampliación y/o mejoramiento de establecimientos existentes para generar 2.050 nuevas plazas de alojamiento, aunque ello “no logró dar respuesta a la sobrepoblación, ni solucionó el déficit estructural carcelario”, se lee en el documento presentado por el ministro.
De acuerdo al texto, “entre los años 2016 y 2019 se produjo un incremento extraordinario en el número de personas privadas de la libertad. En 2015 la cantidad de encarcelados era cercana a los 35.000, con una tasa de prisionalización de 240 personas por cada 100.000 habitantes; a finales de 2019 la cifra era de 308 por cada 100.000 habitantes, es decir con una población de casi 49.000 presos”.
"El Servicio Penitenciario Bonaerense afronta la sobrepoblación más alta de su historia, cuyo registro se ubica por encima del 100%, de acuerdo a la capacidad de alojamiento de las 58 Unidades Penitenciarias y 10 Alcaidías Departamentales existentes", se lee en la presentación.
RECHAZO
El proyecto de ley provocó el rechazo de la mayoría de los vecinos de la zona ribereña, que sostienen que no quieren cárceles en una zona poblada. "Queremos familias, no delincuentes" figura en una de las pancartas publicadas en las redes sociales.
En una encuesta realizada en un grupo vecinal, donde se preguntaba sobre la opinión de los ciudadanos sobre la construcción de una alcaidía penitenciaria en la zona, los resultados fueron contundentes. 243 personas votaron en desacuerdo del proyecto mientras que 56 votaron a favor de la iniciativa.