La Justicia de Quilmes condenó con penas de ejecución condicional a dos policías que golpearon y patearon a un joven para aprehenderlo en la villa Iapi de Bernal Oeste. El caso tomó estado público luego de que se viralizara un video filmado por un vecino.

Marcelo Ampuero recibió 3 años de prisión y el doble de inhabilitación para ejercer cargos públicos, mientras que Ezequiel Guzmán recibió 2 años y 10 meses de prisión y el doble de inhabilitación, al ser considerados culpables de cometer “apremios ilegales y vejaciones” contra un adolescente que al momento de los hechos, en 2018, tenía 17 años. Además de las condenas en suspenso, deberán acreditar la realización de cursos sobre Derechos Humanos.

Cabe destacar que ambos fallos son de ejecución condicional, de manera que ninguno de los dos irá preso. El pronunciamiento estuvo a cargo de la jueza titular del Correcional N° 5, Sandra Martucci, que avaló en su fallo el requerimiento en los alegatos del fiscal Jorge Squeo.

Durante el juicio que comenzó el pasado viernes se escucharon las declaraciones de la víctima y los condenados, además de los alegatos de la defensa y la querella. Al culminar el juicio, Alicia Sena, tía del joven, manifestó: “Se hizo justicia. Sentimos que se termina una pesadilla para nosotros y agradecemos a todos los que nos ayudaron en este tiempo”.

Cabe recordar que los hechos ocurrieron el 17 de octubre de 2018 en la zona de la Villa Iapi en Bernal Oeste. Ampuero y Guzmán se encontraban aquella mañana buscando a los autores de un robo de un automotor que había ocurrido la noche anterior en la zona de Bernal Centro. Al coincidir parcialmente la descripción de uno de los sospechosos con la que llevaba el adolescente, los efectivos comenzaron a perseguirlo y en un descampado de la zona comenzaron a propinarle golpes en el rostro y el cuerpo con su Itaka y a patadas.

De manera fortuita, la violenta escena fue filmada por un vecino de la zona y las imágenes no tardaron en hacerse virales en las redes sociales. Ampuero y Guzmán fueron separados de la fuerza por el entonces ministro de Seguridad, Cristian Ritondo.