Al menos una decena de patrulleros y numerosos efectivos de la Policía Bonaerense se hicieron presentes para proteger al edificio de algunas personas que intentaron ingresar por la fuerza pateando las puertas para derribarlas, mientras que también hubo forcejeos, gritos e insultos. El reclamo era que el acusado fuera sacado bajo arresto del establecimiento educativo por la fuerza pública y trasladado a la Comisaría.

Pasadas las 17, el saldo era de un patrullero destrozado a piedrazos y por lo menos un efectivo herido. Uniformados del Grupo UTOI y del Comando de Patrullas de Quilmes acudió en apoyo para reforzar la seguridad en la zona, pero los ánimos siguen agitados y al momento no lograron calmar a los manifestantes.

Según consta en la denuncia policial, en la que interviene judicialmente el fiscal Ruggieri de la UFIJ N° 8, el abuso sexual habría ocurrido el viernes pasado en el baño de la institución educativa. La madre de la víctima se enteró de lo sucedido cuando la niña le contó que tenía dolores en sus partes íntimas.

Ante este relato, la mujer fue inmediatamente al colegio para hablar con los directivos, pero la respuesta que habría obtenido fue un presunto intento de encubrir al sospechoso: "Los directivos del colegio le recomendaron no radicar denuncia hasta que ellos realicen sus investigaciones", se asegura en el informe oficial. Además, al intentar identificar al sindicado, la Vicedirectora se negó a aportar datos personales.

Fotos: Gentileza BernalTv