Tres delincuentes ingresaron a robar en un edificio de Bernal centro, pero por un hecho fortuito el ilícito se vio frustrado. Es que se quedaron atrapados en el hall del edificio hasta que un vecino les abrió la puerta para que se fueran, pensando que salían de visitar uno de los departamentos.
Ocurrió en el inmueble situado en la esquina de las calles Boedo y Rawson. Hasta allí llegaron dos hombres y una mujer, que habrían forzado la puerta para ingresar. Sin embargo, se encontraron con el ascensor trabado y la puerta de la escalera cerrada con llave. Como si esto fuera poco, una ráfaga de viento les cerró la puerta, quedando la mujer del lado de afuera y dos cómplices encerrados.
Cerca de 25 minutos se quedaron deambulando por el recibidor y las cocheras hasta que bajó un vecino mayor de edad. “Le dijeron que ‘buscaban un baño’, por suerte no le hicieron nada y se fueron”, indicó uno de los moradores del edificio en diálogo con InfoQuilmes.
Respecto de los sospechosos, describió que “eran dos hombres bien vestidos con acento extranjero. Además de la mujer que estaba en la puerta había otro hombre en un auto que no llegamos a ver por cámaras propias, pero justo hay una cámara de la Municipalidad que apunta perfecto a donde supongo que estaba. Esto fue muy organizado”, señaló.
Cabe recordar que hace apenas un mes en la misma cuadra una banda de delincuentes intentó entrar a robar en una casa de familia derribando la puerta a patadas y topetazos. Afortunadamente, la misma estaba “blindada” y, pese a los violentos golpes, no consiguieron tirarla abajo. Dentro había un niño de apenas 10 años que estaba solo y quedó muy asustado por la situación. En la ocasión, el accionar delictivo quedó grabado por las cámaras de seguridad domiciliarias.