Para esta obra, que lleva más de dos meses de avance, prevé su finalización para agosto y es financiada mediante un convenio con el Ministerio del Interior, se estuvieron ejecutando tareas de albañilería integrales que comprenden la reparación de revoques, solados, cielorrasos, carpinterías, acabados y un cambio completo de fachada. La cubierta se cambió completamente, reponiendo a nuevo todas las aislaciones e instalación pluvial.

Se recompuso también el completo de las instalaciones sanitarias, eléctricas y se instalará a nuevo la climatización del edificio. Además, se realizó la colocación de claraboyas y extractores de aire eólicos en los locales que no contaban con ventilación ni iluminación natural. Esta reforma es clave para garantizar condiciones de trabajo seguras e higiénicas.