Según indicaron, la semana pasada se denunciaron al menos diez casos en la zona de 12 de Octubre y Urquiza, mientras que en los últimos días también se reportaron hechos similares en varias viviendas ubicadas en las inmediaciones de la Cervecería Quilmes y del barrio Villa Argentina.
Los vecinos afectados expresaron su indignación y preocupación por esta modalidad de robo, que además de causarles un perjuicio económico (superior a los quince mil pesos), les impide contar con el servicio hasta que reparen el daño. Además, en muchas ocasiones, los delincuentes al retirarse dejan la llave abierta, provocando una pérdida de gas y poniendo en peligro a toda la cuadra.
Los caños de cobre que se utilizan para conectar los medidores de gas con las instalaciones internas de las viviendas tienen un alto valor en el mercado negro, ya que se venden por kilo a los chatarreros. Según estimaciones, cada kilo de este tipo de metal puede llegar a valer entre 5000 y 6500 pesos.