La plaza Villa Armonía, ubicada en Tucumán entre Blas Barera y O’Higgins, se convirtió en un escenario de disturbios y descontrol por parte de grupos de jóvenes que se reúnen con autos y motos, corren picadas, se alcoholizan y ponen música a todo volumen. Los vecinos denuncian que no pueden dormir y que además son víctimas de agresiones cuando reclaman que “bajen la música”.
Según relataron, el problema se viene repitiendo desde principios de noviembre, todos los fines de semana y a veces incluso los días de semana. “Estamos desesperados, son las 5, 6 de la mañana y no pudimos dormir en toda la noche, y la mayoría tenemos que trabajar temprano. Amablemente se les ha pedido que bajen la música y en algunas ocasiones respondieron con botellazos en las casas, una vecina tuvo que llamar a emergencias por el ataque de nervios que vivió”, relató una de las afectadas.
Los vecinos indicaron que hicieron varios llamados al 911 y al Municipio, pero que no les brindaron soluciones definitivas para la problemática. “No queremos vivir más así, con miedo y sin poder descansar. Queremos que las autoridades se hagan cargo y que nos devuelvan la tranquilidad que teníamos antes”, manifestaron.