El conflicto vecinal sucede hace tiempo en una casa ubicada en Húsares entre San Mauro y Benito Pérez Galdós, y llegó a la redacción de este medio luego de un pedido de ayuda urgente por parte de una familia. Uno de los moradores, contó a InfoQuilmes que necesitan "visibilizar el caso para poner a salvo a toda la familia ante cualquier hecho que pueda ocurrir en un futuro".

La denuncia consta de una serie de episodios que se vivieron en un lapso de tiempo entre dos vecinos. Uno de ellos involucró la violencia, ya que le arrojó piedras hacia los vidrios de la casa, taladró paredes y llegó a amenazar con un cuchillo a la gente.

"Teníamos una buena relación con él, hablábamos de hechos de inseguridad, partidos de fútbol, inclusive un verano cuidamos de su auto dejándolo que lo estacione dentro de nuestro garaje", expresó uno de los integrantes de la familia afectada. Y agregó: "Luego de una terrible pérdida para nosotros que fue la pérdida de nuestro abuelo durante la pandemia, nuestro papá se hace cargo de la empresa familiar y heredó la camioneta, por lo que empezamos a hacer mejoras en el frente de la casa para cuidarla"

Fue ahí cuando, según relatan las víctimas, comenzó el conflicto entre ellos. "El vecino tomó consciencia de este cambio y se empezó a quejar sobre nuestro portón que según él chocaba muy fuerte contra su pared. Ante su queja nosotros rápidamente procedimos a llamar al herrero y solucionar el problema. No conforme con esto siguió buscando problemas, por ejemplo por el tema de la medianera, que según él la estábamos ocupando. Averiguamos por medios legales y le explicamos que dichas quejas se tendrían que haber efectuado hace años y ya no están en vigencia, pero siguió encaprichado de que no era así y que lo 'podíamos arreglar entre nosotros'", detalló.

El nivel de violencia fue escalando hasta el punto de llegar a las agresiones contra la propiedad: "Preferimos ir por medios legales y consultarlo con un familiar abogado que se hizo cargo de la situación, esto enojó al vecino y entró en un ataque de ira utilizando un objeto para romper los vidrios que teníamos en la galería de nuestra casa. Durante este hecho se encontraban en mi casa mi hermana, mi mama y yo, los cuales no entendíamos qué estaba pasando y empezamos a grabar, también dándonos cuenta de que corría peligro nuestra perra que ya tiene más de 17 años y no escuchaba el ruido de los vidrios rotos cayendo sobre ella. Naturalmente salimos a confrontarlo, estando la policía presente, y el mismo admitió que estuvo mal y que solo fue 'una calentura del momento", explicó

Uno de los últimos hechos de violencia ocurrió el domingo 25 de febrero. "Luego de estar todo el día enfiestado y alcoholizado con sus amigos por el partido Boca - River a las 11:50 de la noche nos tira una botella de Jack Daniels a la altura de la habitación de mi hermana", comentó.

La familia realizó varias denuncias en comisaría y fiscalía pero aseguran que jamás fueron escuchadas y que solamente fueron archivadas. "Todas estas denuncias fueron llevadas ante la fiscalía UFI N°11 de la ciudad de Quilmes, la cual no emitió acción alguna más que patrullajes espontáneos que caducaron hace tiempo y no actuaron ante las nuevas denuncias", concluyó.