Cuando la ONG "Caballos de Quilmes" rescató a "Bambú", los voluntarios comenzaron a notar algo alarmante en su estado: restos de hilos y basura aparecían en su estiércol. Esta situación derivó en una obstrucción intestinal severa, lo que llevó a los especialistas a realizar estudios exhaustivos y a trasladarlo de urgencia al quirófano. Sin embargo, lo que encontraron superó sus peores expectativas.
Al inspeccionar a "Bambú" en profundidad, los veterinarios descubrieron signos de abuso extremo. Se sospecha que sus anteriores dueños le habían insertado una manguera por el recto, lo que le provocó lesiones en los intestinos y múltiples desgarros en el colon. Además, el caballo presentaba una fractura de mandíbula mal soldada que le dificultaba masticar y alimentarse adecuadamente.
La ONG "Caballos de Quilmes" compartió en sus redes sociales un emotivo y desgarrador mensaje sobre "Bambú":
"Bambú vivía sobre la basura y se alimentaba de ella cada día. Las personas que lo tenían jugaban a ser doctores. Lo atendían como querían, lo medicaban como querían y hasta procedían a meterle desde sus manos hasta una manguera con el fin de hacer enemas caseros. Sumado a una fractura de mandíbula mal soldada que le dificultaba poder masticar. Un caballo pura sangre con su pasaporte y papeles que terminó descartado en la miseria misma ¿Cuánto más?"
"Una de sus "dueñas" declaró en la causa judicial que "el caballo padecía hemorroides ya que lo había picado un mosquito y esto le causó dengue". Esto no es ignorancia. No señores ¡Esto es maldad! Se ríen de todos. Sabían muy bien lo que le habían hecho al animal pero inventaban historias de película... como si todo se pudiera tapar con un dedo."
"¡Qué vacío enorme dejaste, Bambú! Te habías podido recuperar del prolapso, pero toda la basura que comiste por hambre y lo que te hicieron, te arrebató la vida. Cuánto dolor has pasado en la injusta vida que te hicieron padecer. Galopa, lejos, ya no hay más dolor."