La zona perjudicada abarca la Avenida Centenario entre Domingo Sobral y Florencio Varela, así como también la calle Casinelli —que corre paralela— en el mismo tramo. En todos estos hogares, el suministro de agua está completamente interrumpido desde hace más de una semana, lo que obligó a los vecinos a modificar su rutina diaria, recurrir al acarreo de bidones y buscar alternativas para cubrir necesidades básicas como la higiene y la cocina.
Los vecinos afirman haber realizado decenas de reclamos a AYSA, el ente regulador del agua, e incluso a autoridades municipales, pero hasta el momento no recibieron ninguna respuesta ni presencia de operarios que se acerquen a evaluar la situación o brindar una solución.
“La situación es insostenible. No podemos seguir así, con chicos, con gente mayor, sin poder bañarnos ni tirar la cadena. Ya llamamos a todos los lugares posibles y nadie se hace cargo. Hoy vamos a cortar Alberdi para que nos escuchen”, señaló una de las vecinas afectadas.