El pintoresco barrio Villa Argentina, uno de los más emblemáticos de Quilmes, atraviesa una situación crítica por el desborde de cloacas que afecta a sus calles y genera serios problemas de higiene y convivencia.
Según explicaron los vecinos, el inconveniente comenzó hace algunos días y, pese a los reiterados reclamos, las autoridades y empresas involucradas no brindan una respuesta concreta. “Llamamos a AySA, al Municipio y hasta a la Cervecería, pero todos se tiran la pelota. Mientras tanto, nosotros vivimos con el olor y el agua servida en la puerta de nuestras casas”, expresaron.
Las familias advierten que la situación no solo afecta la calidad de vida, sino que también representa un riesgo sanitario, sobre todo para niños y adultos mayores. En algunas esquinas, los desbordes forman verdaderos charcos que dificultan la circulación peatonal y vehicular.
Ante la falta de una solución inmediata, los vecinos evalúan organizar una protesta para visibilizar el problema y exigir que alguna de las partes involucradas se haga cargo de las obras de reparación necesarias. “No pedimos nada extraordinario, solo queremos vivir dignamente”, remarcaron.
Mientras tanto, Villa Argentina, barrio caracterizado por su identidad histórica y comunitaria, se encuentra sumido en un conflicto que, aseguran, podría haberse evitado con una mínima coordinación entre las autoridades.