El Quilmes Atlético Club recibió en las últimas horas una notificación oficial de la FIFA, en la que se le comunica una sanción impuesta por el Comité Disciplinario. La misma se debe al incumplimiento de la inhibición para incorporar jugadores, que regía a raíz de una resolución del Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) en el litigio con el club chileno Unión La Calera por la compra del arquero Lucas Giovini en 2016, durante la gestión de Andrés Meiszner.
De quedar firme la medida, Quilmes no podrá incorporar futbolistas durante los próximos dos mercados de pases, tanto en el ámbito local como internacional. La decisión llega en pleno inicio de las conversaciones por refuerzos, lo que representa un duro golpe para la planificación deportiva de la institución de Guido y Paz.
El TAS falló a favor de Unión La Calera y, como consecuencia, se estableció una medida cautelar que le impedía a Quilmes contratar jugadores del exterior desde principios de 2024. Sin embargo, en el mercado de mitad de año de ese mismo año, con Mateo Magadán como presidente, el club incorporó al delantero Emanuel Herrera, proveniente del Ñublense de Chile, y lo presentó oficialmente el 8 de julio.
Este incumplimiento motivó la intervención de la FIFA, que ahora aplicó la sanción deportiva. Además, la resolución incluye una multa económica para la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), por haber habilitado al jugador pese a la restricción vigente.
La dirigencia que encabeza Carlos Giulianetti analiza la resolución y cuenta con un plazo de 10 días para presentar una apelación e intentar revertir la medida. También buscarán mantener reuniones con autoridades de la AFA para evaluar los caminos legales y administrativos que permitan levantar la sanción, que compromete seriamente la conformación del plantel al menos hasta la temporada 2026.