Según trascendió, los telegramas de despido fueron enviados el lunes 3 de noviembre, invocando el artículo 245 de la Ley de Contrato de Trabajo, que regula las desvinculaciones con indemnización. Sealed Air cuenta con unos 200 operarios y 100 empleados administrativos en su planta de Quilmes, por lo que el recorte representaba casi el 30% de su plantel.
Frente a la decisión, los trabajadores paralizaron la producción y realizaron asambleas dentro del establecimiento. Tras tres días de conflicto, el Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires convocó a una audiencia que derivó en la conciliación obligatoria, estableciendo un plazo de 15 días hábiles para negociar.
El Sindicato del Personal Petroquímico confirmó la medida y advirtió que, mientras dure la conciliación, la empresa no podrá avanzar con los despidos. En tanto, desde Sealed Air sostuvieron que la reestructuración “responde a un proceso global de optimización de recursos”, que implicaría una reducción del 40% del personal.
La compañía, dedicada a la fabricación de envases Cryovac y embalajes protectores, forma parte de un grupo multinacional con sede en Charlotte, Carolina del Norte (Estados Unidos). A nivel global, Sealed Air registró ingresos por 1.350 millones de dólares durante el tercer trimestre del año, aunque prevé un menor crecimiento en 2026, según informaron fuentes del sector.