La concentración comenzó en el Colegio Nazareth y avanzó hasta las instalaciones del club, en Alsina 771, donde los asistentes dejaron flores blancas y velas en homenaje al pequeño. En la puerta de la institución, una tía de Benicio leyó un emotivo comunicado en nombre de la familia:
“Hoy nos reunimos en esta marcha pacífica y silenciosa para pedir justicia por Benicio. Para que su muerte no quede impune. Para que asuman la responsabilidad que correspondan y, sobre todo, para que nunca más vuelva a ocurrir una tragedia evitable. Este pedido de justicia también es un llamado a la conciencia y la responsabilidad colectiva. Es un reclamo que trasciende el dolor individual y busca que todas las instituciones, clubes y espacios deportivos refuercen sus cuidados, protocolos y controles para garantizar entornos seguros.”
Con aplausos y en un clima de profundo respeto, los vecinos, compañeros, docentes y amigos de la familia acompañaron el reclamo, que busca evitar que se repitan tragedias como la que conmocionó a toda la comunidad quilmeña.