Una mujer de 66 años que vivía encerrada en una casa de Ezpeleta Oeste, fue rescatada este miércoles por la Policía gracias a un alerta vecinal. Su hijo, quien la mantendría secuestrada en el lugar sin agua ni comida, fue detenido e imputado por “privación ilegítima de la libertad”.
Según trascendió, la jubilada se encontraba débil debido a las precarias condiciones en las que era obligada a vivir desde hace unos seis meses en su domicilio de la calle Gran Canaria entre Paraguay y Namuncurá. Una vez al día, generalmente de noche, su hijo le llevaba algo de comida y le dejaba dos botellas con bebida, pero le cortaba el agua corriente al retirarse. Además, el ahora acusado -de 33 años- le habría quitado el DNI y el carnet del PAMI para cobrar él su pensión.
Esta mañana, la mujer reunió fuerzas y pudo levantar una persiana de la casa, se arrastró por el piso hasta el patio y logró pedir ayuda, pese a las amenazas de muerte que recibiría de parte de su hijo. Unos vecinos la escucharon y llamaron de inmediato al 911, por lo que se comisionó rápidamente personal de la Comisaría Tercera de Quilmes, al mando del comisario Diego Moyano.
Los efectivos forzaron la puerta y pudieron liberar así a la jubilada. Mientras era asistida, la víctima relató a los uniformados los malos tratos físicos y psicológicos que recibía. Ante ello, la fiscal de la UFIJ N° 7, Ximena Santoro, ordenó la detención del hijo de la mujer que se concretó minutos más tarde en un allanamiento a su domicilio, en la calle Ascasubi e Hipólito Yrigoyen, de Quilmes Sur.
Personal de la Policía Científica realizó peritajes y relevamientos en la vivienda de la víctima, confirmando las precarias condiciones de la misma. En tanto, el sindicado como responsable de los aberrantes hechos quedó alojado en la Seccional Tercera, donde se lo notificó de la formación de la causa en su contra por “privación ilegítima de la libertad agravada por el vínculo”.